Cómo elegir un nicho.

Bienvenido al segundo episodio de mi podcast!

Aquí vamos a conversar sobre todas las estrategias, tácticas y herramientas para desarrollar tu marca y crear un negocio aprovechando las ventajas que nos ofrece internet.

En esta ocasión, vamos a conversar sobre la decisión más importante que tienes que tomar ANTES de empezar a desarrollar tu marca:

Cuál es el nicho en el que te quieres posicionar.

Pero antes de entrar materia, quiero contarte que el episodio anterior ya casi alcanza las 100 descargas, y la audiencia desde el inicio es de múltiples países.

Hasta ahora hay gente escuchando el podcast desde Chile, Colombia, Perú, México, Argentina, Uruguay, Brasil, Venezuela, Estados Unidos, España, Reino Unido, Suecia, Suiza e incluso 3 personas desde Bangladesh.

Me encantaría que este segundo episodio sobrepase las 100 descargas la primera semana, si me quieres ayudar, puedes calificar el podcast con 5 estrellas en iTunes o compartir el link gabrielroitman.com/escuchar en tus redes sociales.

Ahora entremos en materia…

Probablemente elegir un nicho te suene como algo tan fácil de hacer que te no te haga mucho sentido dedicar todo un episodio del podcast a esto.

A mucha gente le pasa lo mismo, porque para elegir un nicho no se necesita adquirir ninguna habilidad especial ni utilizar ninguna herramienta compleja.

Pero déjame advertirte una cosa… Esta es la piedra fundamental sobre la que se construye toda tu marca, y posteriormente, tu negocio.

Te voy a contar todo lo que sé sobre este tema y que me parece necesario que consideres al momento de decidir para que comiences con el pié derecho.

Primero vamos a definir qué es un nicho, luego te voy a explicar por qué es importantísimo que elijas un nicho y finalmente cómo elegir tu nicho.

Tu nicho no son todas las personas que te gustaría que compren tu producto o servicio, ni tampoco todas las personas que podrían o deberían hacerlo.

Tu nicho es un subconjunto de esas personas, a las que tú decides intentar captar con esfuerzos proactivos.

No porque no te gustaría recibir además a otras personas, ni porque lo que ofreces no le sirve también a otras personas, sino porque tus recursos de marketing son limitados y prefieres orientarlos a un grupo reducido de personas dentro de tu mercado potencial para que estos esfuerzos sean más efectivos.

Imagínate el caso de un dentista que define a su nicho como cualquier persona con dientes en su ciudad…

¿Cómo podría enfocar sus esfuerzos para llamar la atención de estas personas?

Es imposible.

Probablemente pondría un cartel en la carretera en una zona de la ciudad, pagaría por un espacio publicitario en un revista sobre automóviles y en un programa de radio sobre actualidad.

Lo que terminaría ocurriendo es que sus esfuerzos se terminaría diluyendo porque la probabilidad de que una misma persona vea las 3 comunicaciones es virtualmente de 0.

Mientras que si el mismo dentista hubiese definido a su nicho como a los “padres de niños que estudian en los 5 colegios más cercanos a su consulta y que sus hijos tienen caries” podría haber firmado un convenio con los 5 colegios para ofrecer descuento a sus alumnos, enviar un email o incluso una carta física a cada uno de los padres, poner un cartel en el sector de esos colegios, mencionar a esos colegios en sus publicaciones en las redes sociales, etc.

Y además, el hecho de que las personas de su nicho sean cercanas empezaría a generar boca en boca con el tiempo.

Esto no significa que si es que llega un niño de otro colegio o un niño que no tenga caries no lo tenga que atender, sólo significa que no va a hacer esfuerzos proactivos por buscarlos, para que sus esfuerzos proactivos sean sinérgicos entre sí y tengan una mejor efectividad.

Normalmente la mejor forma de definir a tu nicho reúne al menos 2 tipos de variables: un perfil demográfico (como edad, género y ubicación geográfica) y un interés común (que puede ser resolver un problema, conseguir un objetivo, u otro).

Elegir un nicho no sólo es importante porque te ayuda a orientar mejor tu inversión de tiempo y dinero en marketing.

También es importante, porque te ayuda a especializarte en tu producto o servicio, y en tu manera de comunicarlo.

Para seguir con el ejemplo del dentista, él podría decorar su consulta y la sala de espera especialmente para niños de etapa escolar, dejar revistas que sean interesantes para niños, regalar folletos sobre cómo mantener la higiene bucal con más dibujos y menos texto, etc.

Pero también, podría estructurar su agenda de forma distinta y dado que se va a orientar a caries, podría dar citas de 30 minutos en lugar de una hora y abrir su consulta a la 1 de la tarde ya que antes los niños están en clases, y dejar sus actividades personales como ir al gimnasio o al supermercado para las mañanas.

De la misma forma ocurre en todos los negocios. Cada perfil de cliente tiene sus propias particularidades, y el costo operativo de atender a todos los perfiles de cliente es muchísimo más alto que enfocarse en sólo 1.

Muchos emprendedores creen que al utilizar una definición de nicho mucho más amplia y que abarque a la mayor cantidad de personas posible va a conseguir muchos más clientes, y lo que finalmente les termina ocurriendo es que sus esfuerzos de marketing son mucho menos efectivos y sus costos operacionales mucho más altos.

A otros les pasa que entienden la importancia de elegir un nicho, pero no se atreven a hacerlo por miedo a equivocarse y tratan de partir siendo generalistas para después de haber atendido a un número suficiente de clientes, poder elegir un nicho basándose en su experiencia.

El problema con esto es que la experiencia de atender a medias a todos los nichos posibles no te va reportar el feedback que necesitas.

Es mucho mejor decidirte por uno, y si luego de un tiempo prudente no estás teniendo los resultados que esperas y piensas que el motivo es que el nicho no es el adecuado, puedes decidirte por otro y probar.

A mucha gente le ocurre cuando se enfrenta a este decisión, especialmente cuando se trata de desarrollar su marca personal, que le cuesta decidirse porque le gustan muchas cosas, y siente que al elegir una le está dando la espalda al resto.

Si es tu caso, considera lo siguiente: Al empezar a crear marca en un nicho cualquiera, estás más cerca de poder crear marca después en otros nichos, no más lejos.

Vas a crear una audiencia compuesta por personas que disfrutan de tu estilo comunicacional y muchos de ellos pueden además tener otros intereses comunes contigo.

De hecho es muy habitual que una persona que publica cursos online sobre un tema luego comienza a publicar cursos sobre otros.

Además, los conocimientos que vas a adquirir y habilidades que vas a desarrollar te van a servir para trabajar tu marca después en cualquier otra dirección que decidas tomar.

Así que elige un nicho y comienza ahora.

Sólo ten en consideración que no todos los nichos son iguales.

Hay nichos más rentables que otros. De hecho hay nichos que nos son rentables para nada.

De la misma forma, hay nichos en que vas a tener algunas ventajas competitivas y otros en los que no.

Antes de elegir un nicho, considera las siguientes cosas:

1.) En primer lugar, ¿Podrías escribir 50 artículos sobre ese tema?

Hay temas que son tan acotados que no dan para hablar mucho, y si no tienes mucho que decir, no vas a poder crear contenido después para posicionarte.

De la misma manera, puede ser que no sepas mucho sobre ese tema y que tampoco te motive tanto como para aprender más.

Piensa que si te comienza a ir bien, vas a tener que seguir creando contenido, dando charlas, haciendo videos, quizás empieces tu propio podcast, y si no es un tema que te motive, va a ser muy aburrido para ti.

2.) En segundo lugar… ¿Es un tema apasionante para las personas del nicho?

Con esto me refiero a que las personas del nicho típicamente lean sobre eso, sigan a líderes de opinión, comenten en las redes sociales, etc.

Es posible que identifiques una necesidad importante pero que las personas del nicho no se apasionen por eso.

Si no es un tema apasionante, va a ser difícil que después lean tus artículos, vean tus videos, te sigan en las redes sociales y vayan a tus charlas.

3.) Por último… ¿Hay ya otras personas o empresas ganando dinero en ese nicho?

Esto es muy importante revisarlo antes de empezar.

Que exista competencia es bueno.

Eso significa que las personas de ese nicho invierten en ello, que no es sólo una afición que satisfacen con material gratuito.

Puedes revisar si hay libros o productos relacionados que se vendan bien en Amazon, o que haya avisos con distintas ofertas en Google.

Si no hay nadie logrando hacer dinero ahí, es muy difícil que tú logres cambiar esa dinámica.

Haz una lista con los 3 nichos que más te interesan hoy mismo y decídete por uno para empezar esta misma semana. Desde el próximo episodio vamos a empezar a ver cómo desarrollar tu marca posicionándote como autoridad, para crear después un negocio.